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Tips para salir invictos de sus primeros 15 días con tu bebe

noviembre 1, 2021

Papás, ¡calma! Nos tomamos con humor los miedos e inseguridades que los invaden tras la llegada a casa con su recién nacido, pues es cuando comienza realmente el trabajo. Pero teniendo en consideración algunos simples consejos, de seguro verán que todas las advertencias que recibieron durante el embarazo resultarán algo exageradas. Los invitamos a tomar nota para que disfruten cada segundo del nuevo integrante de la familia.

1.- Lactancia

No cabe duda que la lactancia materna siempre será la mejor alternativa para un recién nacido, pero existen diversos factores que pueden retrasar la bajada de la leche, produciendo gran estrés en la madre. Para reducirlo al máximo y disfrutar completamente de esta experiencia, se sugiere definir con el pediatra alguna opción de relleno que pueda utilizarse en casos de extrema urgencia. Teniendo este producto en casa, de seguro la ansiedad disminuirá, especialmente si al momento del alta aún no se ha podido amamantar de manera exitosa.

2.- Muda

En la clínica de seguro les enseñaron cómo mudar a su guagua, y ya han tenido un par de días para practicar con la supervisión de una enfermera, pero siempre es bueno reforzar algunos puntos relevantes para su correcta ejecución. Durante el primer mes de vida se sugiere usar exclusivamente agua tibia y algodón para evitar irritar su piel. Una vez limpia la zona, cubrir ligeramente con vaselina, que formará una capa protectora. Además, tener siempre a mano pomadas para coceduras; en el mercado hay en pasta y spray. Por último, es importante conocer cuál es la frecuencia de muda ideal. Se aconseja que se lleve a cabo previo a cada toma de leche, ya que si se realiza posterior a esta, se pueden provocar vómitos producto del movimiento y levantamiento de piernas.

3.- Limpieza del cordón

Entre el día 10 y 15, su guagua perderá el cordón umbilical, pero hasta que eso no ocurra, una correcta limpieza es fundamental para que este proceso concluya de manera exitosa. ¿Cómo hacerlo? Muy simple. Se toma con mucho cuidado la zona seca, se levanta ligeramente y se limpia su base con un algodón con alcohol. Esto debe efectuarse después de cada muda. Una vez que se desprenda, podrán por fin darle su primer baño.

 4.- Su primer baño

Tal como les explicamos, meterlo por primera vez a su tina será una actividad que podrán realizar solo una vez que haya botado el cordón umbilical. Habiendo ocurrido esto, los consejos son los siguientes:

– Tener la pieza y baño a una temperatura promedio de 21°C, la que puede ser levemente superior en los meses de invierno.

– Utilizar una tina de niños, pues al reducir el espacio de acción, será más fácil tener el control de su cuerpo.

– En caso de emplear mallas tipo hamacas, procurar siempre afirmar el cuerpo del recién nacido, pues a pesar de que queden bien instaladas, posee aberturas por las cuales frente a un pequeño descuido podría resbalarse y quedar sumergido bajo esta. Es un accidente bastante frecuente, por lo que se recomienda no soltarlo a pesar de que se tenga la sensación de estabilidad.

– En el mercado es posible encontrar termómetros que facilitan la tarea de dar con el punto exacto para bañarlo, pues se sugiere que la temperatura del agua sea la misma que la del cuerpo, es decir, entre 35°C y 37°C. En caso de no tener uno, se puede usar una técnica muy simple que es la de introducir el codo o la parte interior de la muñeca para comprobar su óptimo estado.

– Por último -y aunque suene muy básico- asegúrense de contar con absolutamente todo lo que necesitarán a mano: jabón, shampoo, cepillo, toalla, y su ropa.

5.- Entretención

Si bien en un comienzo el recién nacido estará dormido gran parte del tiempo, una manera de entretenerlo, estimularlo y tener preciados minutos de libertad, es utilizar elementos como móviles con sonido o sillas nido que vibren, se muevan o tengan elementos visuales atractivos como luces y colores. Utilicen lo que ofrece el mercado a su favor, ya que existe una variedad enorme de opciones, por lo que de seguro encontrarán alguna que se adapte perfecto a lo que busquen para su guagua.

 6.- Uñas

Lo más común es que las guaguas nazcan con las uñas medianamente largas. Este hecho se puede transformar en un riesgo para su piel, ya que al no controlar los movimientos tienden a tocarse la cara, provocándose múltiples rasguños. Frente a este hecho, se sugiere comprar un cortaúñas infantil, los que tienen una forma que facilita la tarea e, incluso, existen alternativas que incorporan una lupa, la que evitará cometer errores, en especial si se considera lo diminutos que pueden llegar a ser sus deditos.

7.- Mucosidades

Es normal que los recién nacidos boten mucosidades los días posteriores al parto. Esto no significa que se haya resfriado, sino que es la manera natural que tienen para eliminar secreciones que permanecen en los conductos nasales. Cuando estas obstruyen su nariz, para que la guagua respire mejor, se puede limpiar con suero fisiológico y aspirar la mucosidad con una pera de goma o un aspirador nasal. Sin embargo, se aconseja que esta situación sea conversada con el pediatra, para que sea él quien chequee si corresponde a una congestión natural o no.

8.- Deposiciones

La frecuencia y la consistencia de las deposiciones son variables, pero durante los primeros 15 días, y especialmente si el recién nacido se ha alimentado exclusivamente de leche materna, esta debiese ser prácticamente líquida, y el color va variando desde verde oscuro hasta un amarillo algo dorado. En caso de alimentarlo con fórmula, puede que las heces se endurezcan un poco, pero si su guagua se muestra incómoda, adolorida o estítica, es necesario consultar al doctor de inmediato.

9.- Vómitos

No se asusten si el recién nacido regurgita un poco de leche tras las tomas, pero si el vómito es explosivo y considera cantidades importantes, es recomendable acudir al pediatra.

10.- Llantos

La forma de toda guagua de comunicarse es el llanto, por lo que hay que sacarse la idea de que está tratando de llamar la atención o manipular a los padres. Cuando su hijo llore, respondan de inmediato a ese llamado, pues así le demostrarán que lo quieren y entienden. Teniendo esto en consideración, es esencial saber que existen diversas razones que lo llevan a esta manifestación: hambre, frío, calor, sueño, dolor, malestar e incluso cuando requieren de una muda. Con el tiempo aprenderán a reconocer los distintos sonidos, pues cada uno de ellos tiene tonalidades distintas, pero paciencia, ya que este es un aprendizaje mutuo que recién comienza.

11.- Coceduras

La piel de su guagua es extremadamente sensible, por ello hay que tener presente los resguardos mencionados en el tip sobre su muda, pero además existen otros factores que pueden provocarle coceduras. Entre ellos, los más comunes son los pañales, que pueden estar elaborados con elementos que irritan su piel, por lo que si tras aplicarle cremas la situación no se resuelve, hay que considerar cambiar de línea o marca. También pueden producirse por la composición de las deposiciones del menor, las que al ser muy ácidas simplemente provocan un sarpullido. En este caso, la madre debe analizar su alimentación.

12.- Sueño

De seguro, este es el punto en el que más advertencias y consejos han recibido, pues efectivamente es uno de los aspectos que más cambia con la llegada del nuevo miembro de la familia. Pero para lograr llevar la fiesta en paz, es fundamental entender que sus constantes despertares son completamente normales y no significan que estén haciendo algo mal. Su guagua lo hace como forma de protección, puesto que debe confirmar que hay un adulto a su alrededor, que es quien le asegurará su alimento. El consejo es simple: dormir cada vez que se pueda, para poder sumar las horas de antes, pero de manera parcelada y nuevamente mucha paciencia, ya que es una etapa que requiere de la madurez cerebral del menor para que se normalice, y esto puede tomar tiempo.

13.- Cólicos

Suelen ser muy dolorosos, pero con un poco de observación les será simple reconocerlos, ya que la guagua tiende a doblar sus piernas en dirección al abdomen (subiéndolas rápidamente), lo que viene acompañado de un llanto de dolor. Si su hijo los padece, practíquenle masajes para ayudarlo con la digestión y en caso de ser persistentes, recurran al pediatra para que revisen en conjunto otras posibles causas como la alimentación de la madre, o bien la fórmula que se le está dando de tomar.

14.- Temperatura del hogar

Considerando que es invierno, el tema de la temperatura del hogar se vuelve un factor esencial, ya que ayuda a evitar enfermedades. Esta debe ser pareja y cercana a los 21°C. Al utilizar calefacción, recuerden ventilar los espacios todos los días, para lo cual se sugiere trasladar al menor a otra habitación por 15 minutos, abrir ventanas y dejar que el aire circule al interior de la casa.

15.- Sicología de la mujer

Para que estas primeras semanas sean una experiencia completamente positiva a nivel familiar, deben tener presente que la mujer -tras el parto- comienza a vivir una etapa llamada puerperio, la que se extiende por 2 años (y no 40 días como se cree usualmente) y en la que requerirá de mucho apoyo de su pareja y gente cercana como padres, hermanos o amigos.  Muchas veces se confunde con la depresión post parto, sin embargo, solo se trata de un proceso natural en el que la sensibilidad está a flor de piel y, por lo mismo, reconocer las necesidades se vuelve fundamental. Acá es el hombre quien debe asumir muchas de las labores que hasta antes del nacimiento del nuevo hijo eran responsabilidad femenina como, por ejemplo, las compras de supermercado o el pago de ciertas cuentas, pues ella estará conectada en cuerpo y mente con el recién nacido, y esa tranquilidad es lo que ambos necesitan.